Un tema que ha estado muy en boga en los últimos días es el llamado “stealthing”, una conducta del hombre durante la intimidad donde éste sin consentimiento verbal de su pareja se quita el preservativo.
Ya en algunos estados de EU se ha tipificado incluso como un delito, llegándose a comparar con una agresión sexual.
Esta conducta “no sólo es inmoral, sino ilegal”, así de claro lo planteó Cristina García, miembro de la asamblea de California que presentó el proyecto de ley, ya aprobada por el Gobierno.
La insensibilidad que aducen algunos hombres al usar este elemento anticonceptivo, también se pudiera traducir en un acto machista que pone en riesgo la vida de una mujer en todos sentidos, desde enfermedades de transmisión sexual, -algunas con riesgos mortales-, hasta embarazos no deseados, que pudieran llegar a la interrupción con serias consecuencias físicas y psicológicas, ni hablar de las legales.
Quisiéramos pensar si hablamos de la “insensibilidad” masculina de aquellos primeros condones elaborados con ¡caucho! que datan desde 1870. O los primeros elaborados con látex que se estima aparecieron hasta 1830. Un hombre de hoy, ¡se muere!
En lo personal APOYO ESTA LEY PORQUE EN VERDAD ES UNA CONDUCTA MÁS ALLÁ DE IRRESPONSABLE O EGOÍSTA, “ES INMORAL E ILEGAL” de la cual aún no se ha tomado la seriedad ni la conciencia en perjuicio de la mujer.
