Durante estas fechas es costumbre reunirse con familia y amigos para un verdadero festín con deliciosos manjares típicos de las celebraciones.
Es importante preparar un menú equilibrado sin renunciar a los platos típicos como la pierna adobada, los romeritos o el pavo, pero añadiendo comida saludable como ensaladas variadas verduras y hortalizas.
Reduce los embutidos para botanear, en su lugar come frutos secos.
Prefiere el pescado, aunque no olvides que el típico bacalao contiene alto contenido de sal; cómelo con moderación.
Elige los postres que sean elaborados con frutas naturales.
Los refrescos, ponche de frutas, cerveza, cócteles y todo tipo de alcohol aportan grandes cantidades de azúcar. Limítalos.
Toma bebidas espirituosas con mezclas bajas en azúcar. El vodka es el alcohol con menos calorías, con unas 100 calorías por copa. El whisky tiene algo más, unas 110 calorías por trago.
¡Y las burbujas! El Prosecco tiene unas 70 calorías por vaso de 100 ml, en comparación con su primo más glamuroso, el champán, que tiene unas 95 calorías por vaso.
El vino varía en función del dulzor de la uva que se elija, pero una copa de vino tinto o de vino blanco tiene una media de 84 a 90 calorías.
Las mejores uvas tintas secas incluyen Pinot Noir, Merlot y Cabernet Sauvignon. Entre las blancas secas el Pinot Blanc, el Sauvignon Blanc y el Pinot Grigio.
Opta también por tomar agua natural e infusiones para favorecer la digestión.
En estas fechas, es inevitable comer de todo, Utiliza platos medianos y procura no repetir ningún platillo, disfruta del arte de comer ¡CON MODERACIÓN!
¡FELICES FIESTAS!
