ME MANIFIESTO OVEJA NEGRA desde mi origen, yendo siempre e innatamente a contra corriente.
En escuela primaria no me gustaba el fútbol. Un estigma imperdonable en Argentina. En la adolescencia, fiel acompañante de mi padre en el campo, lejos del bullicio de las primeras fiestas y… del fútbol.
Tras la reprensión militar , la hermosa libertad de la época universitaria nos permitía ser transgresores y rebeldes, inspirados en el new wave europeo. Una nueva crisis económica me llevó a España, descubrí que nos llamaban “sudacas”- redefiniendo mi esencia, me sentí más OVEJA NEGRA que nunca.
La “Hotelería Champagne”, divertida, burbujeante, transgresora , todo un referente de estilo de vida, una seductora relación de Moda, Reality Shows y Fiestas… Lanzamientos de champagne franceses y de carros italianos; festivales de cervezas europeas y mucha música, un éxito irreverente, que muchos imitaron, pero que casi nadie ha igualado.
Innovando, marcando tendencias, y pagando sus precios… Pero como OVEJA NEGRA siempre en reinvención, en evolución y redimiendo. Cada vez + quisquilloso en mis proyectos, busco apegarme a la sostenibilidad y al compromiso.
Una evolución inesperada, sin prejuicios, y encontré otro camino. El yoga pasó de ser una necesidad física a un estilo de vida: es la conexión íntima, desde el corazón, con cada aspecto de mi existencia cotidiana.
En este manifiesto como OVEJA NEGRA renuncio al yoga comercial y superficial, que busca apantallar con personas “ideales” en posturas “ideales” para IG, porque “EL ÉXITO DEL YOGA, NO RESIDE EN LA PERFECCIÓN DE LAS POSTURAS, SINO EN CÓMO IMPACTA POSITIVAMENTE EN NUESTRA VIDA Y EN RELACIÓN CON LOS DEMÁS”, COMO DIJO EL MAESTRO DESIKACHAR, Y EN ESO ANDO.
Como OVEJA NEGRA quiero compartir las enseñanzas de mis queridos Maestros, posiblemente desde un centro en el que podamos ayudar al rebaño a que deje de obsesionarse por la búsqueda externa y superflua, y comience a re-conectar con su corazón, que es el Corazón del Yoga. Namasté
