Santos Brujos Tempranillo es la razón de ser de Viñas del Sol, el primer viñedo mexicano certificado orgánico desde el 2012 por CCOF.
“A través de éste buscamos elaborar el mejor vino que somos capaces de hacer con las herramientas que contamos”, dice Sergio Salgado, su director general.
“Es un vino que busca representar la armonía con la que se trabaja el campo. Fue un año frío, con mañanas y tardes frescas, lo cual da sutileza en su expresión”, dice su enólogo Luis Peciña.
El aporte de la madera está presente, para un potencial de guarda medio -alto.
Su intensidad aromática es fina, se perciben notas ligeramente especiadas, balsámicas, la frescura del campo, los mentoles y los aromas terciarios que aportan los vinos robles francés.
En boca se manifiesta con un buen ataque, con larga permanencia.
SANTOS BRUJOS es genuinamente un vino tan terrible y espantosamente delicioso, que da miedo su embrujo.
LALO PALOMEQUE
Sommelier
“Por ser un vino muy estructurado y potente, lo recomendaría con tapeo de jamones ibéricos y quesos madurados como el manchego, incluso croquetas españolas harían un maridaje perfecto para equilibrar la grasa, almidones y lo lácteo de los alimentos”.
JACKIE JIMÉNEZ
Sommelier
“SANTOS BRUJOS es un vino definitivamente muy interesante, complejo, carnoso que me atrevería armonizar desde un Matambre en aguachile negro, o unos tacos gaoneras de ryb eye o un mole negro oaxaqueño”.