El movimiento apenas tocó base en México, y ese es el escabroso tema. ¿POR IMPUNIDAD? ¿POR MOJIGATISMO? ¿POR LA SUMISIÓN PERSIGUIENDO AÚN A MUCHAS DE SUS MUJERES? Tal vez.
Las redes fueron la plataforma para denunciar CON NOMBRE Y APELLIDO, y en el ostrisantismo de muchas por la represión, la exclusión, el castigo silencioso y la muerte social.
El #METOOMÉXICO, sin duda, tiene su valor: romper el silencio ante el acoso y los acosadores, a visualizar la problemática de que nuestra libertad sexual no se vea afectada de ninguna manera, a exigir al Estado su responsabilidad de emprender decididamente campañas preventivas y acciones punitivas en defensa de los derechos de todas las mujeres.
PERO HAY LA OTRA CARA DE LA MONEDA: EL REGRESO AL OSCURANTISMO, A LA INQUISICIÓN, POR LA DENUNCIA POR VENGANZA, POR FAMOSEO MEDIÁTICO Y POR DINERO!
Ese es el asunto del anonimato contra la nobleza de este movimiento. GRITEMOS NOMBRES Y APELLIDOS para que tengamos el derecho de que sean juzgados.