Mark Whitwell, franco, controversial, siempre fiel a su estilo, nos plantea que, por medio del Yoga de las Relaciones, podemos liberarnos de las imposiciones y limitaciones impuestas por la sociedad. Desatanizar al cuerpo y al sexo, dando a la intimidad sexual el espacio sagrado de conexión que le corresponde: Raúl Petraglia
Vivimos el final de siglos de demonización religiosa de nuestro cuerpo y nuestra sexualidad. Incontables vidas arruinadas por la falsa dicotomía de “el cielo arriba y nosotros abajo”. Cuando ubicamos lo divino fuera del nacimiento, la muerte, la sexualidad y la vida, degradamos nuestra humanidad. Estadísticamente se revela que el sexo real está en declive, mientras que el consumo de pornografía aumenta, volviéndose el sexo cotidiano cada vez más violento y extremo. No sorprende que algo hermoso y puro, como la capacidad humana de expresar amor a través de la intimidad sexual, se corrompa cuando se la enmarca de este modo durante milenios.
Así como el corazón bombea sangre a través de sus arterias y venas, el cuerpo expresa su deseo por la intimidad y el placer sexual. Si pudieras deshacerte del condicionamiento social y actuar desde la pura inteligencia corporal, encontrarías poca resistencia a la manifestación y el cultivo de dicha energía vital y sagrada.
Cada persona requiere la expresión natural de sus necesidades y deseos. Un deseo autentico por la intimidad franca, por entregarse a la polaridad elegida. Pero, para la mayoría de las personas, su capacidad de expresarlo se enreda entre la expectativa social y sus propias limitaciones mentales. La negación espiritual del sexo, su distorsión comercial y la exageración pornográfica, conforman un amplio espectro de represión y disfunción. Resultando en una falta evidente de sensibilidad y conexión.
CUANDO PRACTICAMOS ESTE YOGA DE CONEXIÓN CON LA REALIDAD, SE LEVANTAN SUAVEMENTE LAS IMPOSICIONES QUE HEMOS HEREDADO. Se renueva una verdadera intimidad con todos los aspectos de la vida, para nosotros y para las generaciones futuras. Sé que nuestros Antepasados y Maestros están muy agradecidos al ver que su arduo trabajo y su lucha están dando frutos a medida que la humanidad evoluciona con la practica del Yoga que nos legaron.
