“Mark nos lleva a reflexionar en cómo el yoga moderno puede convertirse en una herramienta + del mercado, la ortodoxia y la superficialidad. Aunque aclara que el yoga en estado natural es la conexión directa de cada una de nuestras células en el universo omnipresente. Yoga es literalmente hacer el amor con la vida”: Raúl Petraglia.
El Yoga proviene de una gran cultura de sabiduría que floreció durante 1000 años hasta el siglo XIV.
Se ocultó del público mientras la ortodoxia masculina utilizaba lo espiritual como medio de control público.
Sin embargo, el yoga da poder y autonomía al individuo. Es el medio práctico por el cual cada persona conecta con los ideales de la Existencia y su propia espiritualidad. Es participación directa en la Realidad dada.
Inocentes yoguis se obsesionan con actividades gimnásticas exageradas o manipulaciones innecesarias de sus sistemas, bajo la promesa de un estado de “perfección futuro”, negando que ya somos la perfección del cosmos.
Es obvio que cada partícula del cuerpo y mente son el mismo cosmos. Es tan obvio que no nos damos cuenta de ello, nos sucede como con los peces que no saben que nadan en el agua.
El yoga ha sido convertido en un producto de estilo de vida. Algunos profesores de yoga son, sin saberlo, cómplices de la imposición patriarcal a un público inocente. Imponiendo al cuerpo la obsesión masculina del yoga moderno por las líneas rectas y los ángulos.
En la Madre Naturaleza no hay líneas rectas. Sólo curvas y espirales. No abuses de tu cuerpo. Déjalo en paz. Dale una oportunidad para que su inteligencia intrínseca funcione en relación absoluta con la naturaleza.
Muévete y respira en ella. El cuerpo ama su respiración. La inhalación ama a la exhalación y viceversa, fortaleza que es totalmente receptiva. La fortaleza que no es capaz de recibir, se rompe.
Yoga es literalmente hacer el amor con la vida interior y exterior. Asana es hatha Yoga, el tantra no dual de la intimidad directa con la realidad misma. Yoga es descolonización global que deja a cada cuerpo en estado Natural.
Texto original @markwhitwell
@markwhitwell | www.heartofyoga.com