EL CHILE EN NOGADA no sólo es uno de los platillos más emblemáticos de México, es el embajador más sofisticado, y está de manteles largos celebrando sus ¡202 años!
LA HISTORIA DEL CHILE EN NOGADA se registra en 1821, cuando las monjas agustinas del convento de Santa Mónica, allá en Puebla, lo elaboraron a base de un chile poblano relleno de carne y frutas de temporada para ofrecerlo al emperador AGUSTIN DE ITURBIDE como un platillo que representara los colores de LA BANDERA DEL EJÉRCITO TRIGARANTE.
EL CHILE EN NOGADA se sirve durante los meses de julio a septiembre, época de cosecha de la mayor parte de insumos con los que se elabora.
Durazno criollo, manzana panochera, pera lechera, granada y nuez de castilla, alcanzan su punto de maduración en los meses de julio a agosto, de tal forma que comienzan a estar listos para el mes patrio.