Una vez más, es a partir de una explosión en una plataforma de Pemex que se detecta un derrame no reportado por las autoridades.
Ante ello, urgimos información transparente, medidas de atención, mitigación y de no repetición; y una conversación sobre Pemex y la seguridad de sus trabajadores, la seguridad de las comunidades que conviven con su infraestructura, el futuro de la petrolera y su innegable responsabilidad frente a la crisis climática”, explicaron las organizaciones civiles a través de un comunicado.
Es la denuncia Organizaciones de la sociedad civil que detectaron un derrame de petróleo en Sonda de Campeche, de la plataforma Akal-B de Petróleos Mexicanos (Pemex), el cual inició alrededor del 22 de marzo de este año y al menos hasta el mes de mayo seguiría activo, acumulando casi un mes de fuga ininterrumpida.
Según las comunicaciones de Pemex, la paraestatal se refirió a este siniestro como un “conato de incendio”. No obstante, según el Centro de Derecho Ambiental (CEMDA), al momento, dos trabajadores perdieron la vida, hay un desaparecido y 9 más resultaron heridos.
El aumento del 152% en la frecuencia de “accidentes” de Pemex en los últimos 2 años, evidencian que en Pemex se han tomado decisiones que anteponen la extracción acelerada de combustibles fósiles a la inversión en seguridad y mantenimiento de la infraestructura existente.
Además de que a la par muestran una disminución del 49% en el presupuesto destinado al mantenimiento de instalaciones.